• Saltar a la navegación principal
  • Skip to content
  • Saltar a la barra lateral principal

DE CAMINO HACIA MÍ

  • Inicio
  • Sobre mí
  • Servicios
    • One To One
    • Conect@dos
  • FAMILIA Y DEPORTE
  • Regalo
  • Blog
  • Contacto

LABERINTO EMOCIONAL-LA TRISTEZA

6 diciembre, 2017 / by Antonio Molino / 2 comentarios

La tristeza, la gran denostada de esta Sociedad volcada en el entretenimiento y divertimento continuo. La tristeza es quizás la emoción con la que más podemos aprender de la vida y crecer con ella. Además por mucho que queramos evitarla, no será posible.

Después del primer post  LABERINTO EMOCIONAL. INTRODUCCIÓN, continúo la serie con este segundo que dedico a laTRISTEZA.

La TRISTEZA es una de las emociones consideradas “malas”, una emoción de la que todo el mundo querría escapar.

En una sociedad volcada hacia el entretenimiento y la diversión, la tristeza está mal vista, no tiene cabida, está prohibida.

Pero las emociones no son negociables aparecen queramos o no, porque no depende de nosotros.

Conozco a mucha gente que le cuesta conectar con la tristeza, que la aparta de su vida, que no se permite estar triste y os puedo asegurar que eso produce mucha angustia.

Pero como dije en el anterior artículo, la tristeza es solamente una emoción neutral,

Una reacción psico-fisiológica que surge como adaptación a los cambios externos e internos que se producen en nuestra vida y entorno.

Normalmente las emociones no vienen aisladas, si no que se presentan varias a la vez, siendo complicado en muchos casos reconocer cuál es la primera que apareció, es decir cuál es la emoción primaria.

Por ejemplo, en enfado en todo su esplendor puede ser una emoción secundaria que esté tapando otra emoción, por ejemplo, la tristeza. Que en este caso sería la primaria.

Me referiré, en este artículo, como a la tristeza cuando se presenta como emoción primaria a un estímulo externo.

¿Pero para qué nos sirve la tristeza?

  1. Nos da información: Una pérdida
  • De una separación física o psicológica, pérdida o fracaso
  • De una decepción, especialmente si se han esfumado las expectativas o esperanzas puestas en algo o alguien.
  • Situaciones de indefensión, cuando no hay control
  • De un dolor crónico
  • …
  1. Funciones:
  • Cohesión con otras personas, especialmente con aquéllos que se encuentran en la misma situación.
  • Disminuimos nuestra actividad diaria. Nos lleva a valorar otros aspectos de la vida que antes de la pérdida no teníamos en cuenta.
  • Sirve para comunicar a los demás que no nos encontramos bien, y puede generar que nos proporcionen ayuda mediante la compañía, más empatía y no agresión.

Hasta aquí, como vemos, la tristeza, aunque es una emoción que nos produce un estado afectivo no agradable,  simplemente se dispara para informarnos de una pérdida y además cumple con las funciones sociales y adaptativas que acabo de comentar.

El problema está en cómo gestionamos ese estado afectivo desagradable.

 Dependiendo de cómo sea nuestra gestión,  la tristeza se nos presentará como una emoción primaria saludable o una emoción primaria no saludable.

 La tristeza como emoción primaria no saludable

Viene alimentada por las heridas y pérdidas de nuestro pasado.

De pronto una situación actual o un pensamiento enlaza con el almacén donde se encuentran los recuerdos que activan este estado emocional y lo activan, haciendo que la situación presente la sintamos de forma desproporcionada.

Pondré un ejemplo;

Imagina que después de un día de trabajo con mucho estrés, estás deseando llegar a casa para recibir abrazos y comprensión. Pero llegas a casa y sientes un recibimiento frío, realmente no era lo que necesitabas.

En ese momento comienza a aparecer un sentimiento intenso  alimentado por todas las situaciones que has tenido ese mismo estado emocional.

Esto hace que lo que era una tristeza por el simple sentimiento de pérdida que se produce cuando no se dan las expectativas creadas, se convierta en una intensidad desproporcionada con respecto a la situación.

Será necesario trabajar este tipo de sentimientos para no caer en un dolor irracional.

Dependiendo de la intensidad del estado emocional provocado por la tristeza como emoción primaria no saludable tendremos más o menos desgaste emocional.

Además si se repite de forma continuada puede hacernos caer en estado permanente de tristeza que ni siquiera sepamos cuál es su origen.

Ese estado continuado en el tiempo puede transformar la tristeza en  depresión.  La depresión viene sin darnos cuenta, transité hace un tiempo por ella. Aprendí mucho.

¿Pero cómo podemos prevenir que caigamos en tristeza no saludable?

Dos claves que a mí me sirven para salir sin demasiado desgaste de las situaciones de tristeza.

No es fácil, se necesita practicar para cambiar de hábitos, y además hay situaciones que son mucho más complicadas que otras. Aunque el proceso para salir y crecer con la experiencia es el  mismo bajo mi punto de vista.

  1. Toma de conciencia.

¿Cuál es la emoción primaria?

Para el pensamiento y RESPIRA.

Busca un espacio en cuanto puedas y por favor ¡RESPIRA! Profundamente.

Si no estás acostumbrada a la respiración consciente y te pone más nerviosa, como me pasaba a mí al principio, busca lo que te conecte.

Quizás un paseo, una música, escribir, cocinar, pintar,  lo que sea. Para la avalancha de pensamientos y estate atenta a tu cuerpo. Relajación atenta.

Como he comentado antes, las emociones no vienen solas. Nuestro sistema emocional es complejo y suelen aparecer sentimientos y emociones varias a la vez.

Es importante localizar cuál es la emoción primaria, la que ha disparado nuestro estado emocional en ese momento.

La tristeza suele venir acompañada con el enfado, y también por el miedo. Por ejemplo ante la pérdida de un trabajo, aparece el miedo y la incertidumbre por el futuro.

En ese estado de relajación atenta es cuando podrás identificar los pensamientos que te llevan a disparar emociones que inicialmente no estaban y que de alguna forma intensifican el dolor de la pérdida con sufrimiento extra.

Y ahora aceptemos que estamos tristes, no pasa nada, es natural estarlo frente a una pérdida,  escuchemos la información que nos trae y crezcamos con ella.

  1. Aceptación de nuestro estado de tristeza

Difícilmente, por no decir imposible, vamos a poder evitar un estado emocional.

Queramos o no somos mamíferos. Y todos los mamíferos compartimos una parte del cerebro, llamada “cerebro límbico”, donde se desarrolla el sistema emocional.

La pérdida es un clásico de la vida. Vamos perdiendo la niñez, la juventud, el tiempo, trabajos,  salud y personas. Cuantos más años vivamos más situaciones de pérdida vamos a tener, y en cada una de ellas se disparará la tristeza.

Para poder crecer y aprender con ella, no nos queda otra que aceptarla cuando llega.

Siéntela en todo tu cuerpo, escucha lo que te dice. Llora si te sale llorar.

En las pérdidas de personas queridas, que suelen ser las más dolorosas, reconfórtate en las vivencias positivas con esas personas.

Muchas veces  solo pensamos en lo que no hemos hecho  por ellas, pero te puedo asegurar que siempre hay también  muchas cosas que hemos hecho y compartido.

A veces necesitaremos estar solos y otras no, en esos momentos llama a personas con que te puedan dar lo que necesitas en ese momento. Todos las conocemos.

La vida es emoción. Estamos totalmente condicionadas por ellas y no las podemos controlar, pero sí podemos gestionarlas para canalizarlas para aprender y crecer con ellas.

Siempre es mucho más fácil decirlo o escribirlo que hacerlo, lo sé.

Espero que te sirva este post para tener otra visión sobre la tristeza.

Si no es así, y no sabes cómo salir de ahí, ponte en contacto conmigo sin compromiso, solo puedo prometerte que te escucharé.

Os deseo felicidad

 

Antonio Molino

 

Bibliografía: Emociones: una guía interna de Leslie Greenberg

 

P.D.:  Próximo post en Laberinto Emocional, EL ENFADO.

 

Te presento las claves que literalmente cambiaron mi relación de pareja

​Descubre en este PDF GRATIS las 4 claves que te ayudarán a afrontar los conflictos con tu pareja desde el amor, la comprensión y el respeto mutuo.

Suscríbete a mi lista de correo y recibirás gratis el PDF

Archivado en: Inteligencia Emocional, Laberinto emocional

« VIOLENCIA Y EDUCACIÓN
ENFADOS-IRA EN LA PAREJA. UN CASO REAL »

Interacciones del lector

Comments

  1. -isabel Marín dice

    6 diciembre, 2017 at 12:47 pm

    Todos los comentarios me gustan porque indican un camino, una luz a los que no todos podemos acceder en los primeros intentos pero que podemos retomar para intentar de nuevo. La tristeza si se acomoda es muy difícil removerla porque se alimenta de nuestras emociones.

    Responder
    • Antonio Molino dice

      6 diciembre, 2017 at 12:56 pm

      Gracias Isabel por tu comentario. Tienes razón a veces la tristeza la tenemos acomodada y no sabemos de dónde viene. Yo tuve una época que me pasaba eso de continuo y que se expresaba en mí a través de la negatividad. Esto me llevó hace 13 años a una ansiedad depresiva con la que aprendí bastante.

      Un abrazo

      Responder

Deja un comentario Cancelar respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Barra lateral primaria

Sígueme en

  • Facebook
  • LinkedIn
  • Twitter

Categorias

  • Autoindagación (3)
  • Comunicación (3)
  • Entrevista Sergi Torres (3)
  • Inteligencia Emocional (10)
  • Ira en la pareja (1)
  • Laberinto emocional (2)
  • Posts Colaborativos (1)
  • Reflexiones (1)
  • Relación de pareja (4)
  • Relación padres-hijos (2)
  • Sin categoría (3)

Copyright © 2021 · Boss Pro en Genesis Framework · WordPress · Iniciar sesión